Cristina Rodlo: la actriz mexicana que se eleva en Hollywood

Cristina Rodlo es la protagonista de producciones como Halo y The Beautiful Game. Ahora, ella habla con Vogue de los retos y las oportunidades que la llevaron a Hollywood.
Cristina Rodlo llevando un vestido transparente de Dolce  Gabbana
Ella es Cristina Rodlo: la mexicana que debes tener en la miraViridiana

Cristina Rodlo, originaria de Torreón, Coahuila, lo supo desde que era niña: quería ser actriz, una actriz de Hollywood para ser exactos y una actriz de Hollywood con estudios en Nueva York. Logró absolutamente todo. Graduarse de la American Musical and Dramatic Academy (basada en la Gran Manzana) con una beca, trabajar en Estados Unidos, México y Europa.

Suena utópico, pero su historia es de esas que demuestran que el camino no siempre es tan sencillo como parece una vez que se conocen los obstáculos sorteados: “Yo decía: ‘es lo mismo soñar en chiquito a soñar en grande, me va a costar lo mismo. Si ya tengo este sueño, quiero que mis oportunidades y mis proyectos, la mayor cantidad posible de gente los vea y conecte, ¿dónde es eso? Pues en Hollywood’”, recuerda sobre sus inicios, cuando le dijo a sus padres la carrera que quería seguir a los 11 años.

Una breve historia sobre Cristina Rodlo

Su trabajo como actriz comenzó en 2008, en el cortometraje Verano 79. En 2019, encabezó titulares, de esos que abundan cuando hay un nuevo rostro latino en la industria y que suelen incluir frases como “la mexicana que irrumpe en Hollywood”. En aquel entonces, compartió créditos junto a Gina Rodriguez en Miss Bala, pero lo que ocurrió antes de eso es un poco más complejo. La actriz llevaba casi seis años trabajando en México, anteriormente había intentado seguir su sueño en Los Ángeles, donde logró un papel protagónico en el filme La condenada.

Ella es Cristina Rodlo, una actriz que no deja definir por estereotiposViridiana

Fue en su país de origen donde se forjó realmente como la intérprete que conocemos ahora: “Si yo no hubiera pasado por México, no hubiera tenido la capacidad actoral que tuve para poder hacer los castings que hice después y que me llevaron a quedarme en papeles en Estados Unidos. Trabajar constantemente me dio unas tablas impresionantes para poder llegar al set o al casting en Estados Unidos y decir: ‘yo sé que tengo no solo el talento, sino las tablas, la capacidad y la entereza necesaria para poder estar aquí, sé que yo me lo merezco y me lo he ganado’”.

Los estrenos de Cristina Rodlo en streaming para 2024

Actualmente, Cristina Rodlo protagoniza la segunda temporada de la serie Halo en Paramount+ con el personaje de Talia Perez, quien le enseñó todo sobre el trabajo en equipo; a finales de marzo, sumará a su filmografía The Beautiful Game, una esperanzadora cinta de Netflix en donde interpreta a Rosita, una futbolista. Son historias diferentes –una está basada en el videojuego de ciencia ficción por excelencia, mientras que la otra se inspira en hechos reales acerca de la Copa Mundial de Fútbol Calle–, sin embargo, ambas comparten exactamente lo que la actriz quiere seguir contando a través de sus papeles: “lo que más quiero seguir haciendo es arte, personajes que cuestionan, que causen algo, personajes que te muevan, que te hagan reír, que te toquen, que muevan fibras en tu ser”.

Rodlo menciona las trayectorias de Penélope Cruz o Marion Cotillard como ejemplos de la dirección que le gustaría dar a sus propios pasos. Ambas actrices son la referencia perfecta de cómo balancear proyectos en Estados Unidos y en sus países de origen: “Es justo lo que estoy tratando de hacer, no dejar mi país, amo mi país, amo hablar en español, amo hacer proyectos aquí en México, poder hacer esas dos mezclas y tener una carrera muy bien cimentada tanto en Hollywood como en tu país, creo que es maravilloso”.

Cristina Rodlo habla de los inicios de su carrera y uno de sus sueños más grandes: tener su propia productoraViridiana

Cristina Rodlo habla sobre ser una latina en Hollywood

En medio de sus éxitos, se encuentra la verdad incómoda de ser una latina en la meca del cine: no ser ‘lo suficientemente latina’, pero tampoco tener acceso a interpretar personajes blancos, precisamente, por sus raíces. “Hablando específicamente de la actuación, creo que el día que le demos las mismas oportunidades a todos los actores sin importar de [su] color, de qué región vengan, que sea simplemente por el talento sin importar si tienes acento, o no, ahí vamos a hacer una diferencia realmente”, asegura, “los personajes que he interpretado en Estados Unidos, hace 11 años no hubiera tenido esa oportunidad porque había un racismo mucho más marcado del que hay ahora, había un estereotipo muy marcado hacia el latino. Yo iba a un casting y me decían: ‘tú no puedes quedar como la latina porque no te ves latina’”.

Así como Cristina convirtió el desafío del acento en una oportunidad para “tener una gama mucho más amplia de interpretación” de sus personajes, también lo hará con el reto de encontrar más oportunidades para sí misma. “[Quiero] crear yo también esos personajes, desarrollar mis propios proyectos, estar detrás de cámaras, poder llevar esa batuta de contar esas historias. Los actores solemos quejarnos mucho de que no nos llegan los proyectos que queremos, mejor dejemos de quejarnos. ¿Por qué no creamos nuestras propias historias? Las que nos morimos por contar. Esos personajes que igual no te van a llegar a ofrecer, pues bueno, me los empiezo a crear para mí misma”.

Los proyectos personales de Cristina Rodlo

Rodlo escribe y comenzará a dirigir su ópera prima al finalizar 2024, con apoyo del estímulo fiscal de EFICINE; aún no puede revelar más detalles al respecto, pero continúa trazando su camino de manera persistente: “Ese es mi plan a largo plazo, crear mi productora, hacer mis propios proyectos, crear trabajo y contenido diferente. Creo que el actor tiene mucho conocimiento, estamos tanto tiempo en el set, sabemos mucho de las historias. Cuando el actor se pone a escribir hay una manera de conectar bastante diferente”, explica.

El tesón es algo sobre lo que se puede aprender de Cristina al conversar con ella. Al retroceder en el tiempo, recuerda sobre esa agridulce llegada a México en 2012, cuando tuvo que buscar su lugar como muchos actores lo hacen, haciendo múltiples comerciales. Es franca al respecto y reconoce que no era el rumbo que quería para su carrera, pero su naturaleza tenaz (que admite como un rasgo de personalidad) convirtió las puertas cerradas en algo más: “Siguen habiendo muchos ‘no’, es la carrera de los ‘no’, tanto los que me dicen, como los que yo digo, porque también he rechazado proyectos”, dice entre risas, “pero sin duda, todas esas puertas no abiertas son oportunidades.

No voy a decir que no ha sido difícil y que muchas veces no quiero tirar la toalla y decir: ‘¿por qué escogí una de las carreras más complicadas de la vida, donde no hay estabilidad, donde siempre estás vulnerable, donde siempre estás buscando cuál va a ser tu siguiente proyecto?’. Pero a la vez, cuando estoy en el set es cuando digo ‘todo vale la pena y no pienso hacer otra cosa en mi vida’”. El amor al arte existe y, si usamos la historia de Cristina Rodlo como testimonio, es mucho menos romántico de lo que nos cuentan pero, eso sí, sumamente gratificante.