Llegar a casa y quitarse los zapatos para caminar por el hogar es una sensación indescriptible. Sobre todo si llevas todo el día fuera y tienes los pies hinchados y adoloridos. Es, en pocas palabras, un acto liberador. Nos da paz.
Sin embargo, caminar descalzo es una actividad a la que nos limitamos sólo en casa –y ni siquiera tan ampliamente– o como mucho en la playa cuando estamos de vacaciones una vez al año y para el corto tramo que va de la sombrilla al mar.
¿Por qué es bueno caminar descalza, según Gigi Hadid?
Sin embargo, caminar descalzo es muy bueno para la salud, y es el método que también utiliza la modelo Bella Hadid para sentirse más arraigada a la naturaleza y conectada consigo misma. Así lo reveló en su entrevista con Vogue Italia para la edición de abril, que Bella protagoniza.
Desde hace dos años, recuperándose del burnout y de la enfermedad de Lyme que padece, la supermodelo se ha refugiado en su rancho, abandonando las pasarelas y centrándose únicamente en su salud física y mental. Aquí ha encontrado un nuevo equilibrio donde los animales y la naturaleza juegan un papel fundamental.
“Cada día busco tiempo para hacer algo que me arraigue, lo que me ‘pone de nuevo en marcha’, explica la modelo a Vogue. Como montar a caballo, escribir, conversar con gente abierta, cuidar de mi perro y estar, simplemente, en la naturaleza”. Es en esos momentos cuando se quiita los zapatos para caminar descalza. Como ella misma dice, caminar descalza sobre el pasto es una de las cosas que hace para reconectar con la naturaleza y consigo misma.
Deberíamos inspirarnos en Bella Hadid y buscar momentos más a menudo en los que quitarnos los zapatos y caminar descalzos (mejor si es durante las primeras 3 horas del día), que no sea sólo en casa al final del día. ¿Quizá en el parque uno de los próximos domingos?
7 razones por las que caminar descalzo es bueno para tu salud integral:
- Mejora de la circulación: La conexión directa con la tierra mejora la circulación sanguínea, reduciendo la hinchazón y la sensación de pesadez en las piernas, proporcionando una sensación de ligereza y bienestar.
- Estimulación del sistema nervioso: Al caminar descalzo, los nervios en los pies se activan, mejorando la función nerviosa y promoviendo una mayor sensibilidad táctil y proprioceptiva, lo que contribuye a una mejor coordinación y equilibrio.
- Reducción del estrés: La conexión con la tierra durante la caminata descalza favorece una sensación de calma y tranquilidad, ayudando a reducir los niveles de estrés y ansiedad, y promoviendo una mente clara y serena.
- Estimulación cognitiva: La estimulación sensorial durante la caminata descalza despierta los sentidos, mejorando la concentración y la agudeza mental, lo que resulta en una mayor claridad de pensamiento y creatividad.
- Fomenta la conexión con uno mismo: Esta práctica nutre la autenticidad y la autorreflexión, permitiéndonos cultivar una relación más profunda con nosotros mismos. Al estar más conscientes de nuestro cuerpo y su interacción con el entorno, ganamos una comprensión más clara de nuestras necesidades físicas, mentales y emocionales, promoviendo un mayor bienestar integral.
- Conexión con la naturaleza: Sentir la tierra bajo los pies despierta una profunda conexión con la naturaleza, lo que puede generar una sensación de arraigo y pertenencia, así como una mayor apreciación por el entorno que nos rodea.
- Sentimientos de gratitud: La experiencia de caminar descalzo puede inspirar un profundo sentido de gratitud hacia la tierra y el cuerpo, recordándonos la importancia de estar presentes y apreciar los regalos simples de la vida. Esta gratitud cultivada puede nutrir nuestro bienestar emocional y promover una actitud más positiva hacia nosotros mismos y nuestro entorno.
Artículo publicado originalmente en Vogue Italia, vogue.it
