¿Ya conoces la tendencia Tenniscore? En medio del distanciamiento social las actividades al aire libre jugaron un papel vital, y el tenis resultó ser el deporte perfecto.
Una red y una cancha de 20 metros se interponían entre el jugador y su oponente. Pero incluso cuando la vida social se reactivó, la popularidad del tenis ha permanecido intacta, y en crecimiento, especialmente en lo que respecta a la moda y a la creación de una nueva aesthetic.
‘Las marcas que tradicionalmente no estaban asociaban con el tenis, desde las de fast fashion hasta las marcas de lujo, han incorporado la cultura del tenis a sus propuestas actuales’, afirma Jason Kim, Vicepresidente Senior de Mercadeo de Lacoste para Norteamérica, sobre el auge de este deporte. ‘A través de la creación de contenidos y el desarrollo de verdaderos productos, este aumento de la popularidad de la ropa de tenis ha acabado por definir la nueva tendencia que vemos y que muchos llaman tenniscore’.
Esta mezcla surge al unir la palabra en inglés para tenis, con core, o tendencia. Lo mismo que ocurrió hace algunas semanas con la famosa tendencia Barbiecore. A propósito del auge del color rosa y el regreso de la muñeca Barbie, con una nueva película protagonizada por Margot Robbie.
El tenis es un deporte conocido por su particular uniforme. En Wimbledon, los jugadores pueden ser multados por no llevar un atuendo blanco en la cancha (como le ocurrió a Nick Kyrgios por ponerse sus Air Jordan 1 blancas y rojas este año).
En 2018, el catsuit negro de Serena Williams en el Abierto de Francia se ganó una reacción innecesaria de la Federación Francesa de Tenis y llevó a la prohibición de trajes similares a futuro. Si bien este alboroto oficial en torno al código de vestimenta se siente comom algo anticuado, muchos que recién se inician en el deporte están descubriendo que los elementos básicos tradicionales del tenis se ven particularmente frescos fuera de la cancha.
Con el aumento del interés, llega la innovación. Marcas clásicas de tenis como Lacoste están encontrando formas de combinar el estilo dentro y fuera de la cancha, asociándose con A.P.C. y Awake NY y ‘mezclando la ropa deportiva tradicional con aspectos de la ropa urbana moderna y la influencia de la era digital’, afirma Kim.
Este verano, la marca de ropa deportiva Wilson lanzó su segunda colaboración con Kith, una firma que ha ayudado a definir la era actual del estilo urbano: ‘Kith ideó un giro moderno en la ropa clásica’, afirma Joelle Michaeloff, Vicepresidente de Diseño de Wilson Sportswear. ‘Juntos, combinamos nuestra herencia con el estilo urbano para crear algo único y especial’, comentaron en ese momento.
La colaboración tomó estilos tradicionales del tenis, como el vestido e incluso la visera, y las reimaginó con un toque de moda. Michaeloff cita la falda de tenis y el clásico polo como dos piezas clave que Wilson está viendo que los clientes estilizan con el mismo fervor tanto dentro, como fuera de la cancha.
La marca Sporty & Rich, fundada por Emily Oberg, lanzó el 11 de julio pasado, una nueva cápsula en conjunto con Prince: ‘El objetivo de Sporty & Rich es animar a las personas a vivir de forma más sana, más felices y por más tiempo, y ayudarles a saber que una actividad como el tenis puede ayudarles a conseguir ese objetivo. Eso siempre ha sido una parte central del espíritu de la marca’, afirma Oberg en un comunicado de prensa.
La colección (una mezcla de prendas de algodón para salir, junto con prendas básicas de estilo preppy, como faldas de tenis y chalecos tejidos) mantiene los elementos técnicos de la ropa deportiva, al mismo tiempo que les imprime un toque de moda.
‘La interpretación del estilo clásico del tenis expresado junto a la cultura urbana, también hace un guiño a la historia de la ropa deportiva tradicional. Y eso es lo realmente interesante, ya que muestra la evolución intergeneracional tanto en la cancha como fuera de ella’, afirma Kim.
Durante siglos, este deporte se asoció a menudo con el lujo exclusivo, ya que se practicaba en clubes privados o en resorts bañados por el sol. Pero en la actualidad es el favorito de quienes buscan un toque de evasión en la vida pospandémica, porque este deporte representa una especie de actividad significativa pero con carácter effortless.
El uniforme completamente blanco, que se lleva al jugar en una cancha de arcilla o de césped recién cortado, no solo nos ofrece un contraste visual, sino que significa la capacidad de quien lo lleva de mantener el tono blanco, un símbolo de riqueza durante gran parte de la historia de este deporte.
Otro elemento del estilo tenis o tenniscore es la joyería. Al fin y al cabo, nada se siente tan frívolo como sudar mientras se lleva un collar o un brazalete de diamantes.
El término pulsera de tennis se originó después de un partido del Abierto de Estados Unidos de 1987 en el que la jugadora estadounidense Chris Evert detuvo el juego para recuperar su brazalete de diamantes después de que el broche se rompiera, volando por los aires. No es habitual que los jugadores lleven joyas en los deportes de contacto, pero en el tenis se considera un elemento clave del look en la cancha.
‘El brazalete de tennis es la pieza de joyería perfecta para llevar mientras se practica este deporte o cualquier otra actividad deportiva’, asegura Kim-Eva Wempe, propietaria y socia gerente de la marca de joyería Wempe. ‘Este es un lujo práctico que se ve igual de increíble fuera de la cancha, ya que muchas mujeres se visten pensando en la versatilidad. Un simple collar de diamantes puede combinarse con unos jeans y una camiseta o con un vestido de noche’.
En las redes sociales, a medida que los usuarios siguen desarrollando su forma de interactuar con los seguidores, la tendencia tenniscore, liderada por los millennials, nos ha hecho girar la cabeza como si fuera un pase perfecto. No obstante, es la Generación Z, a través de fotos super bien editadas y poses relajadas, la que sabe cómo hacer un smash perfecto.
Hay una cierta sutileza en el look, incluso cuando se viste de blanco de pies a cabeza con ropa de marca. En definitiva, el tenniscore es la tendencia perfecta para ambas generaciones. Es elegante y pulido, pero una selfie sudada después del juego será sinónimo de likes orgánicos. Cuando se trata de minifaldas blancas y diamantes, esta tendencia es simplemente un ganar-ganar.
Looks dentro y fuera de la cancha
Pulseras de tenis clásicas
Accesorios adicionales
Artículo originalmente publicado en Vogue US, vogue.com.
