Aquí Vogue te ofrece un acceso exclusivo, con las mejores fotos de la noche, desde la alfombra roja hasta la pista de baile y con todas tus celebridades favoritas.
Ya que los Oscars 2024 comenzaron una hora antes de lo habitual este año, todo el mundo en Hollywood estaba muy ansioso por continuar con las grandes celebraciones de la noche.
Y aunque la fiesta de Vanity Fair es siempre el evento más popular de la ciudad, este año en particular (en el que alcanzaba sus primeros 30 años) el evento estaba más repleto de famosos que nunca.
Presentada por Radhika Jones, Redactora en Jefe de Vanity Fair, la lista de invitados siempre deja claro “quién es quién” en la industria; con los asistentes más guapos, cool y emblemáticos del mundo del cine, la televisión, la música, el deporte y la moda.
A las 10 de la noche, la fila para pasar por la alfombra roja, que había cambiado su usual color azul zafiro por un clásico rojo, seguía serpenteando por la puerta principal, mientras una multitud de estrellas de alto calibre esperaba para ser fotografiada, antes de entrar en el recinto anexo al Wallis Annenberg Center for the Performing Arts de Beverly Hills.
Dentro, mientras Lindsay Lohan esperaba en la barra para tomar una copa, John Waters observaba a la multitud desde una mesa; también vimos a Sharon Stone que pasó junto a las modelos Carolyn Murphy y Helena Christensen, que charlaban con Paris Hilton. Al otro lado Jennifer Coolidge se reunía con Sydney Sweeney, su compañera de The White Lotus.
Sofia Vergara posó entre las mejores vestidas junto a sus amigas, mientras Larry David (siempre fiel a su estilo) se marchaba temprano. Y eso fue sólo que pudimos capturar en una esquina de la sala. Imagínense todo lo que ocurrió esta noche…
Así fue como los nominados y premiados (entre ellos Sandra Hüller, Cynthia Erivo y Paul Giamatti) seguían llegando, y los meseros hacían sus rondas de entrega con hamburguesas de In-N-Out, la clásica comida de celebración posterior a la entrega de premios.
Yara Shahidi y Charles Melton hicieron fila para hacerse fotos con sus amigos en el photobooth oficial de Vanity Fair, mientras Christopher Nolan se apoderaba de una mesa junto a la pista de baile para su familia y sus dos estatuillas de Oscar. Sam Rockwell y Leslie Bibb prefirieron quedarse de pie para bailar y pronto se les unieron Melissa McCarthy, Matt Damon y su esposa, Luciana Barroso.
En el exterior, Steven Yeun, Chloë Sevigny, Awkwafina, Olivia Wilde y Greta Lee se reunieron en torno a la pizzería Funke, que servía pizzas Diavola y Margherita realizadas en horno a la leña. Jack Huston se reencontró con su tío Danny, mientras que Jeremy O. Harris le hablaba a Billie Eilish para felicitarla por su segundo Oscar.
Momentos después, la multitud estalló en gritos y vítores cuando la cantante fue sorprendida con un regalo: Se trataba de un collar reloj con incrustaciones de cristal rosa. Un detalle del rapero Flaver Flav, quien lució otro a juego, con su nombre y con la tipografía de Barbie.
Otros grandes nombres del mundo de la música hicieron acto de presencia, como Usher, Camilla Cabello, Ice Spice y Busta Rhymes; mientras que el mundo del deporte estuvo bien representado con figuras como Serena Williams, LeBron James, Dwyane Wade y Roger Federer.
Y, cuando el reloj marcó la medianoche, el evento no mostró signos de desaceleración, ya que Greta Gerwig se lanzó a la pista de baile con Issa Rae. Tal parecía que la fiesta solo había empezado.
Aquí todas las fotos de la alfombra roja del afterparty de Vanity Fair: