5 hábitos saludables para cuidar de tu sistema digestivo e intestino

Desde tu salud mental hasta mejoras en tu sistema inmune, la salud intestinal afecta cada parte de tu organismo.
Mujer con suter verde y chamarra de cuero
Mujer con suéter verde y chamarra de cuero. Chris Colls. 

El sistema inmunitario, el estado de ánimo, la digestión, la energía... El intestino y todo el sistema digestivo desempeñan un papel esencial para que todo tu cuerpo funcione de forma saludable. 

El intestino alberga el microbioma, formado por miles de millones de microbiota bacteriana, y la calidad y diversidad de estas bacterias son clave para nuestra salud y felicidad. Aunque los probióticos y la kombucha se han puesto muy de moda en los últimos años, una buena salud intestinal va más de consumir estos productos.

Quizás hayas escuchado de esto porque hay un nuevo programa de televisión, Know Your Sh*t: Inside Our Guts, que se emite en Channel 4, de Inglaterra. Este programa explora el mundo de la salud intestinal y su relación intrínseca con el cuerpo y el cerebro. 

Las gemelas que presentan el programa, Lisa y Alana MacFarlane, eran DJs veinteañeras amantes de la pizza y las papas fritas, hasta que un día participaron en un estudio científico de TwinUK sobre el microbioma intestinal, dirigido por el profesor Tim Spector, epidemiólogo que dedica su tiempo a investigar estas bacterias en el intestino. 

El dolor intestinal frecuente no debe ser normalizado. 

Chris Colls.

Rápidamente, descubrieron que, a pesar de ser genéticamente idénticas, sus microbiomas intestinales eran muy diferentes: ‘Ambas solo tenemos un 30% de las mismas bacterias intestinales; saberlo nos hizo pensar de forma muy distinta sobre la salud y nuestro bienestar’, me cuentan. ‘Nuestra diversidad bacteriana era muy baja antes de participar en el estudio; llevábamos un estilo de vida muy cuesta arriba’. 

Desde el envío de muestras de heces por correo hasta colonoscopias, las dos fueron los ‘conejillos de indias’ del profesor Spector, y se sometieron a rigurosas pruebas: ‘Tim nos sometió a una dieta en la que teníamos que beber alcohol y comer solo alimentos procesados durante el primer mes, y luego a una dieta vegetal rica en fibra durante el segundo’, explican. Lo que aprendieron formando parte del estudio, lo comparten a través de su plataforma, The Gut Stuff, y ahora también a través de la señal de Channel 4.

‘Lo que más queremos es que la gente aprenda la importancia del intestino y lo importante que es el sistema digestivo’, explican las gemelas. ‘Pensábamos que el intestino era únicamente nuestro estómago, pero muy pronto nos dimos cuenta de que en realidad se extiende desde la boca hasta el fin. En el programa, personas con diferentes problemas intestinales, desde estreñimiento hasta hinchazón o flatulencias excesivas, visitan a los expertos del programa en un intento de entender por qué aparecen estos síntomas y cómo tratarlos con éxito’, me explican. 

Además de la gastroenteróloga, la Dra. Rabia Topan y la dietista Sophie Medlin, algunos invitados visitan a una psicóloga y una inmunóloga, lo que ilustra lo interrelacionados que están el bienestar mental y la salud intestinal: ‘A veces no son solo las intervenciones dietéticas las que ayudan, sino las prácticas holísticas, como el trabajo de respiración y la hipnoterapia’, revela Alana. Esto, por sí solo, ‘puede ayudarnos a empezar a entender que el estrés, que muchos de nosotros experimentamos cada día, puede afectar realmente a nuestro intestino y, por tanto, a nuestro estado general de salud’. 

Un microbioma sano es parte de una vida más sana. 

Chris Colls.

Conseguir un microbioma intestinal sano no requiere dietas extremas ni suplementos probióticos caros, sino abordar una rutina de salud y de bienestar con más atención y añadir muchas verduras a la dieta. También hay que dar prioridad al sueño (que incide mucho en el intestino) y va de la mano con el estrés', explica Lisa, ‘para nosotras, al principio, todo lo que fuera algo de bienestar era inalcanzable y un poco místico, y eso no nos interesaba. Pero las cosas que aprenderás en este programa son accesibles y asequibles para todos. Y eso es lo más importante’. 

Tras haber conseguido cambiar la composición de sus propios microbiomas con la ayuda del profesor Spector, las gemelas aquí nos comparten sus mejores consejos para mejorar la salud intestinal: 

Come fibra

‘Hablamos mucho de la fibra en el programa: es como el bajista de un grupo del que nadie sabe el nombre, pero es alguien muy importante. La fibra no solo ablanda las heces, sino que también alimenta las bacterias buenas del intestino. Nueve de cada diez personas no consumen la suficiente cantidad de fibra’. 

Vigila tus heces

‘Tenemos que empezar a romper el tabú de la caca. Si tienes un problema con tus heces, vale la pena que sepas que es la forma que tiene tu cuerpo de gritarte que algo está mal. En el programa repasamos todos los aspectos de los distintos tipos de heces, qué hay que buscar, lo que es normal y cuándo hay que acudir al médico de cabecera’. 

Come más verduras 

'Según lo aprendido en el American Gut Project, deberíamos comer 30 verduras y frutas diferentes a la semana. La clave está en 'comer como el arcoíris': la mayoría de nosotros vamos al supermercado y tomamos las mismas seis frutas y verduras porque sabemos qué hacer con ellas, pero se trata de elegir algo diferente cada vez. ¿Se puede variar, en lugar de cocinar lo mismo durante toda la semana?', ahí está el reto nos comentan. 

Monitorea tu propia salud intestinal

‘Ninguno de nosotros presta atención a su intestino hasta que tiene resaca, está enfermo o tiene un problema serio. Si vas al médico y le dices que te pasa algo, te preguntará cuándo fuiste al baño por última vez. Necesitamos saber esas cosas, por lo que hacer un seguimiento y registrarlo en un diario es una gran idea. Empodérate de estos conocimientos que te ayudarán a cambiar tus hábitos’. 

Obvio, haz más ejercicio

‘El ejercicio ayuda a la movilidad intestinal. A tus microbios les encanta que te muevas. Hay un estudio que tomó una muestra representativa de personas y lo único que cambiaron fue que unas hacían ejercicio y otras no. Cuando el primer grupo dejó de hacer ejercicio, su diversidad microbiana se redujo al nivel básico. Cuanto más te muevas, mejor será tu diversidad bacteriana y tu bienestar general’. 

Artículo originalmente publicado en Vogue UK, vogue.co.uk.