Tyla cambió el agua por la arena en la MET Gala 2024. Así fue como la cantautora nos dejó sin palabras en su paso por la alfombra roja de la noche más importante de la moda.
Para su primera gala y paso por la alfombra roja, la cantante recurrió a Balmain para que le ayudara a dar vida a su fantástico look. Aprovechando que la palabra clave de la noche era tiempo, el equipo de Balmain confeccionó para Tyla un vestido de arena, un guiño a las “arenas del tiempo” y esos relojes clásicos que se usaban en la antigüedad.
La cantante Tyla y su vestido de arena en la MET Gala 2024, uno de los más comentados de la noche
Olivier Rousteing, director creativo de Balmain, se sintió especialmente intrigado por la idea de lo efímero al momento de crear el vestido de Tyla: “La inspiración detrás de esta creación surgió del deseo de redefinir los límites y transformar un material transitorio en una obra maestra eterna”, le explicó a Vogue. “La idea de esculpir una prenda a partir de algo tan efímero como la arena encendió mi imaginación, y no podría estar más contento con el resultado final”, reveló.
“Buscábamos hacer algo creativo, algo completamente diferente para mi primera MET Gala”, reveló Tyla. “Así que cuando Balmain me mostró la idea y el boceto, simplemente supe que era perfecto. La idea era una locura y me encantó. Estoy emocionada y un poco nerviosa, ¡pero tengo muchas ganas de pasar una noche divertida en el Met!”.
El vestido, sin tirantes, abrazaba cada centímetro del cuerpo de la cantante antes de transformarse en una impactante cola de sirena de organza. Confeccionado con tres colores de arena y mezclado con tachuelas de microcristal, el vestido brillaba con cada movimiento de Tyla. En otro guiño a la temática de la noche, también la cantante llevó el bolso de mano en forma de reloj de arena de Balmain.
Aunque se trataba de su primera Gala del MET, Tyla ha demostrado ser una figura de peso en el mundo de la moda. Para los Grammy 2024, la cantante sudafricana lució un vestido de Atelier Versace, en color pistache, sujeto por una malla con puntos de cristal de Swarovski. Y ahora, de la mano de Rousteing, se ha convertido en una auténtica estrella de la alfombra roja.
“Tyla traspasa los límites de la música del mismo modo que yo traspaso los límites de la moda en Balmain”, afirmó el diseñador, “y no se me ocurre una mejor figura para llevar este look, ella es alguien que considero una manifestación de la imaginación, la innovación y el poder transformador del arte”.
Artículo originalmente publicado en Vogue US, vogue.com.
