Melanie Grant es una facialista muy popular entre los famosos de todo el mundo. Victoria Beckham incluso escribió el prólogo de su libro ‘La guía moderna para la salud de la piel’ (una auténtica biblia sobre la salud de la piel), confirmando así lo mucho que confía en ella. ‘Con dos décadas de experiencia en el sector y estudios de primera línea en Sydney, Melbourne, Los Ángeles y Londres, así como residencias temporales en París, Melanie se ha consolidado como una de las mayores expertas mundiales en el cuidado de la piel’, afirma la estrella en el prólogo. He aquí algunos de sus mejores consejos, extraídos de su libro o de la sección 'Escuela de la piel' de su página web.
Las 5 reglas de Victoria Beckham para una piel perfecta
La regla número 1 para una piel sana es tratarla según su tipo. Esto requiere una rutina específica de cuidado de la piel, que también incluye la exfoliación. ‘Una exfoliación regular (de 2 a 3 veces por semana) es esencial para mantener una barrera cutánea sana y funcional’. Los exfoliantes químicos, en particular los alfahidroxiácidos (AHA) como el ácido glicólico, dan buenos resultados en las pieles mixtas.
Para las pieles grasas se recomienda usar exfoliantes químicos suaves como los betahidroxiácidos (BHA), en particular el ácido salicílico, ya que penetra profundamente en la dermis para eliminar todas las impurezas, además de tener propiedades antibacterianas y antiinflamatorias.
Los polihidroxiácidos (PHA) son los exfoliantes químicos más suaves porque no penetran tan profundamente en la piel como los AHA o los BHA y, por tanto, son menos irritantes, lo que los convierte en la mejor opción para las personas con piel sensible. Busca ingredientes PHA como la gluconolactona y el ácido lactobiónico, que también tienen propiedades hidratantes y antiinflamatorias.
Para las pieles secas, por último, lo ideal es recurrir a las fórmulas más suaves de exfoliantes químicos una o dos veces por semana, que no desnudan la piel. ‘Recomiendo un producto a base de ácido láctico, ya que es antimicrobiano y es una de las formas más suaves de AHA’.
Al igual que muchos profesionales, una de las reglas de Melanie cuando se trata del cuidado de la piel es: ¡Menos es más! ‘Cuando utilizamos demasiados productos o cambiamos con frecuencia de uno a otro, podemos dañar la barrera protectora de la piel y su función antimicrobiana. Pero con tantos principios activos potentes disponibles sin receta, desde limpiadores a hidratantes, no es raro que accidentalmente caigamos en el exceso. Los retinoles y los ácidos, por ejemplo, pueden causar irritación cuando se usan juntos, ya que ambos exfolian la piel’, así que todo es cuestión de dosis y combinación. ‘Aunque animo a utilizar principios activos, hay que manejarlos con cuidado. Hay que introducirlos siempre en dosis bajas y dejar que la piel los tolere poco a poco’ ¿Cómo hacerlo? Añade sólo un ácido cada vez a su rutina de cuidado de la piel y espera un mes (el tiempo que tarda la piel en renovarse de forma natural) antes de introducir otros productos activos. Al principio, utiliza una dosis muy baja de producto, solo una o dos veces por semana, antes de pasar gradualmente a un uso más frecuente al cabo de unas semanas, o incluso meses.
¿Por qué? Multiplica por diez su eficacia. Los estudios han demostrado que utilizando una crema que contenga vitamina C (a elegir en envases bien cerrados y opacos), un potente antioxidante, la piel está mejor defendida contra los radicales libres producidos por los rayos solares. Si hay un punto en el que Melanie es inflexible, es la importancia de utilizar un protector solar todos los días, tanto en verano como en invierno. No basta con un producto de maquillaje híbrido que contenga un SPF (a menudo en la base de maquillaje). ‘Si sólo haces una cosa por tu piel, ponte protector solar’, que forma parte integrante del ‘pack básico de rejuvenecimiento’ que recomienda: retinol, protector solar y terapia LED. ‘Recurre a un protector solar adaptada a tu tipo de piel. Una crema química es bien tolerada por todos los tipos de piel. Es ideal sobre todo para las pieles maduras, secas, deshidratadas o con imperfecciones. Las cremas minerales son adecuadas para las pieles sensibles. Deben aplicarse entre 15 y 20 minutos antes de salir y hay que volver a aplicarlas durante el día, ya que su tiempo de protección suele ser de 4 horas’.
En su opinión, los cepillos de limpieza facial, por ejemplo, no son una inversión especialmente buena porque se puede conseguir el mismo resultado masajeando con la yema de los dedos. En cambio, si hay una herramienta que recomienda tener en casa son las mascarillas LED. ‘Ayudan a potenciar la síntesis de colágeno y la hidratación, cicatrizan la piel y reducen las imperfecciones... La terapia LED hace maravillas en todo tipo de pieles y ayuda para todos los problemas’.
Lo mejor es invertir en un equipo realmente bueno (generalmente el más caro) y utilizarlo 2 ó 3 veces por semana, además de hacerse tratamientos ocasionales en un centro de belleza con una máquina LED más potente. ‘Hay tres tipos de tratamiento con LED: luz roja, luz blanca y luz azul. Cada luz penetra en el cutis a una frecuencia diferente, lo que permite tratar problemas específicos de la piel de distintas maneras’, explica. 'La luz roja aumenta la energía celular para acelerar la reparación y la renovación, estimular la síntesis de colágeno, aumentar la hidratación y mejorar la circulación para revertir los daños. La luz roja es ideal para devolver a la piel su vitalidad y luminosidad. La luz blanca se dirige a las células más profundas para activar el proceso de curación, calmar las rojeces y la irritación, reducir la pigmentación y promover una piel sana. Me gusta combinarla con la luz roja para obtener efectos rejuvenecedores. La luz azul destruye las bacterias que causan el acné y mejora la claridad de la piel, al tiempo que calma y reduce las rojeces y la inflamación".
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Aplicar unas finas rodajas de pepino recién sacadas del refrigerador en el contorno de los ojos es un eficaz remedio de la abuela para ‘deshinchar y rehidratar’ la zona. Además de proporcionar un momento de relajación. 'El remedio del pepino para las ojeras no es ninguna broma. Aplicado frío, ayuda a contraer los vasos sanguíneos que provocan la pigmentación. Los resultados son aún mejores cuando lo dejas actuar al menos 10 minutos. Si te has quedado sin pepino, las bolsitas de té mojadas en agua caliente y metidas en la nevera (durante al menos 10 minutos) también son un eficaz eliminador de ojeras, ya que la cafeína promete dejar tus ojos con un aspecto fresco y despierto.
Artículo publicado originalmente en Vogue Francia, vogue.fr.
