Lecciones de estilo indican que los minivestidos no pueden ser portados en la oficina, son exclusivos para contextos informales y despreocupados. Sin embargo, dimos con el truco perfecto para llevarlos y no recibir un memorándum de Recursos Humanos: prestar atención a los zapatos con los que sean aunados. Este es el secreto de estilo que permitirá que prendas disruptivas o un tanto llamativas puedan usarse de manera formal.
En la búsqueda de los zapatos perfectos para lucir minivestidos en la oficina, nos topamos con las flats. Según la moda de Primavera-Verano 2024, este calzado regalará un resultado visual muy favorecedor, se ven actuales y al ser de suela plana acentúan el largo del vestido, logrando así mayor sutileza (palabra clave en ambientes empresariales). Además, descubrimos que son una excelente alternativa para vencer el cálido clima del mes de abril y lucir elegantes, ¿necesitamos más razones para aceptar esta combinación?
Es una realidad que los códigos de vestuario han cambiado, ahora son más flexibles y con menos reglas, incluso empresas creativas permiten looks relajados. No obstante, se trata de un entorno profesional que merece atención a los detalles, por ello, puede aún resultar difícil lucir piezas cortas en dichos escenarios. Así que fusionaremos la esencia formal que caracteriza a la industria organizacional con la estética casual, nuevas ideas e inspiración surgirá de ello.
¿Cómo llevar minivestidos con flats a la oficina en abril 2024?
Comenzaremos por este estilismo, un claro ejemplo de cómo vernos sofisticadas en la oficina. Un detalle a tener en consideración es la tela, pues no es lo mismo portar vestidos en tendencia en satín, denim o tejido de punto. En este caso, elegiremos ese tejido entrelazado para mayor sutileza y daremos el toque final con los zapatos. Unas flats de dos tonos (preferiblemente neutros) serán un epítome de la moda.
Con un poco de delicadeza y mucho romanticismo vestiremos en abril 2024 (seguimos bajo la inspiración coquette). Esta vez, se lo debemos a un minivestido en tweed con corte acampanado que, más allá de estilizar la silueta, regalará elegancia. Si es un día de múltiples juntas, podrá ser aunado con un blazer o una camisa victoriana según su horma. Unos Mary Jane planos sellarán esta combinación.
Este es un atuendo para entusiasta de la moda que desean impactar en la empresa. El total denim jamás defrauda y siempre encanta, por lo que será pertinente elegirlo en un minivestido; bolsillos cargo, desgastes sutiles y hormas oversize serán elecciones exitosas. Lo atractivo de este tejido rígido es que puede aunarse con cualquier tonalidad de calzado, unas bailarinas negras irán muy bien, pero nada como añadir otras también en mezclilla.
Este sería el conjunto al cual acudiríamos para ir por primera vez a la oficina en minivestidos. El corte clásico y color neutro emanan distinción, lo que permite mayor seguridad y profesionalismo en el estilo. Nos resulta interesante las flats simples y atemporales que lo acompañan, pues de estas depende que el atuendo luzca realmente apropiado.
Este es un look que grita tendencia, guiado por las prendas más icónicas de la temporada, como las flats transparentes y los vestidos minimalistas de los 90. Como podría ser una fusión más osada, se aconseja sea portada en organizaciones más creativas donde los códigos son más flexibles. Se podrá complementar con terceras piezas para darle un efecto más elevado, bien sea un blazer o gabardina.
Nuestra guía se basa en dos primicias: la oficina y cómo vestir en el temido calor. Para cumplir con ambas escogimos este vestido en ojalillo, la interpretación de frescura y sofisticación. Como puede tornarse un tanto tropical y más informal, proponemos se añada un complemento, ¿qué tal una chamarra denim? Termina con unas bailarinas a juego y serás la mejor vestida de abril 2024.
Kendall Jenner tiene en su armario la respuesta para lucir apropiadas en la oficina con vestidos cortos. Al igual que el tejido es importante, la horma también lo es, de esta dependerá que tan acertado o no sea el vestido. Las siluetas románticas, con faldones en globo o volantes, darán volumen y ligereza. Evitar un escote pronunciado será otro punto a favor, de esta manera se equilibrará correctamente la figura. Finalizamos con unas bailarinas de punta triangular que serán perfectas para un efecto visual favorecedor.
