No ha pasado ni un mes desde la última vez vimos a Salma Hayek sin maquillaje y en traje de baño, un gesto que ha de antojarse liberador para una reina de la gran pantalla y la alfombra roja, pues en febrero la actriz también posaba con la cara lavada tras una sesión de natación.
Pero en esta ocasión dejó el traje de baño atrás para subir una foto a su perfil de Instagram donde muestra su belleza natural, pero esta vez montando a caballo en la playa durante la golden hour con pantalones y tenis blancos.
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Y aunque la estrella mexicana ya ha compartido su secreto para lucir estupenda en bikini a los 56 años, en esta ocasión revisitaba la fórmula sin maquillaje ni filtros, con el cabello amarrado en dos trenzas, y con pantalones cómodos. ‘Persiguiendo atardeceres 🌅 #vivamexico’, rezaba su publicación en redes sociales, donde cabalgaba por una playa de Los Cabos con tenis blancos durante la golden hour y confirmando que Salma Hayek es la reina de las fotos al natural.
Ya dijo la maquillista Violette, directora creativa de maquillaje de Guerlain, que usar maquillaje a diario suponía una amenaza para la salud mental. Quizá de ahí que la mexicana publique con cierta regularidad este tipo de escenas, que en una ocasión acompañó con estas líneas: 'Me despierto y cuento cuántos pelos blancos y arrugas se han colado en la fiesta esta mañana”. Porque así es, en el último vídeo también se aprecian manchas en la cara y tono desigual de la piel, y no pasa nada en absoluto. Al fin y al cabo, los signos de envejecimiento son también signos de vida, y qué mejor que alcanzar los 56 años exhibiendo, con ellos, semejante belleza.
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Su rostro sin maquillaje era acompañado por dos trenzas con raya en medio, uno de esos gestos de belleza algo infantiles que restan años, como colorear todo el cabello de un mismo tono, sin reflejos ni mechas –este último constituye el truco de belleza que adoptó Dakota Johnson al pasarse al moreno gótico brillante–. Menos es más siempre, sobre todo a medida que pasan los años, y Salma lo sabe y lo exhibe como nadie.
Artículo publicado originalmente en Vogue España, vogue.es.
