Celeste Cid habla sobre su última serie Planners, su carrera y el universo femenino

La artista conversó con Vogue, en pleno estreno de Planners, sobre el personaje que interpreta y nos da letra para hablar de lo que viven muchas mujeres hoy.
Celeste Cid
LUCYLA.

Hay algo que noto parecido entre Celeste Cid y Malena Carregal, el personaje que tiene la fortuna de recibir la vida a través de la actriz argentina en Planners, la nueva serie de Star Plus inspirada en el trabajo de Bárbara Diez, una reconocida organizadora de eventos argentina y, en palabras de la artista, ‘la gurú del proyecto’. Me doy cuenta de que el parecido no es en el sentido estético, aunque ambas derrochen belleza y estilo y Celeste misma confiese que siente que en sus personajes ‘hay algo siempre en común, que es que los personajes llevan indirectamente la mirada de quien está ahí detrás moviéndolos, interpretándolos’.

La actriz argentina, sin dudas, es mucho más juguetona con su look; Malena siempre correcta y minimalista. Creo que la similitud descansa en la tranquilidad que transmite su tan sola presencia. Entre cada palabra se toma sus pausas, las elige, y habla con profundidad, eso me gusta. Definitivamente creo que todo eso es lo que me remite a Malena. Pero no soy yo sola, Celeste también encuentra puntos en común: ‘Malena es una mujer muy ordenada, al menos con el trabajo, muy estructurada, metódica, yo también soy así. Mi trabajo es un lugar de mucha solidez en mi vida, de desenvolvimiento, yo observo el mundo desde mi profesión, por supuesto, son pequeños recortes, pero de pronto estoy en el medio de un casamiento real viendo cómo trabaja un ambientador, de pronto vivo lo que pasa en una cocina o cómo es el universo de una médica… son vidas un poco prestadas que uno cuida de a ratitos’.

Es que desde fines de los 90 la actriz nos mantuvo bajo la costumbre de verla en la pantalla pequeña a diario. Desde Chiquititas y Verano del 98; pasando por algunas novelas icónicas argentinas como Resistiré, Locas de amor, Mujeres asesinas o Para vestir santos; hasta llegar a Las Estrellas o Separadas, sus últimas tiras previo al antes y el después de la pandemia –que, casualmente, la serie fue filmada en plena pandemia–, Celeste Cid ha demostrado a lo largo de más de 25 años de carrera su maleabilidad a la hora de interpretar. Me pregunto, ¿se habrá imaginado en algún momento, esa nena de 13 años que daba sus primeros pasos en la actuación, hasta dónde llegaría? Y ojo, no es que Celeste lleve muy tranquila en su historial solo 26 tiras televisivas, muchas de ellas dueñas de picos de rating, también lleva varios filmes para el séptimo arte, videoclips –la artista tiene una debilidad por la música, no es ninguna novedad, y entre sus coqueteos con ella está el videoclip de Asesíname de Charly García– además de unos cuantos galardones y su participación en 2019 en la serie Monzón, que la llevó por primera vez al streaming en Netflix interpretando, nada más y nada menos, que a Susana Giménez, la reconocida conductora de televisión argentina.

LUCYLA

Pero fue en 2021, aquel año marcado por el barbijo, el alcohol en gel y los testeos, que la actriz escribió en su cuenta de Twitter: ‘La felicidad que siento es mucha, tener la posibilidad de volver a trabajar de lo que me gusta y que sea de su mano. Hasta el fin del mundo’, haciendo referencia a su trabajo en Planners junto al director Daniel Barone; con quien ya había trabajado y quien dirigió tiras como Locas de amor, Mujeres asesinas o Para vestir Santos –sí, perdón la repetición, parece que Celeste es una de las musas favoritas del director–. La artista rememora esas épocas, ‘volver a filmar fue una aventura, siempre los inicios de rodaje lo son, pero este tendrá la particularidad de ser recordado como el rodaje en el que estábamos con máscaras y barbijos, incluso ensayábamos así, fue una incomodidad tras otra, apenas nos veíamos los ojos. Aun así lo hicimos con mucha entrega y agradecimiento: en plena pandemia fuerte filmamos escenas con 200 extras, todas las personas previamente testeadas; yo por momentos me quedaba a un costadito, viendo todo ese despliegue y agradecía, por dentro, esa posibilidad’. Es que esta serie, además de combinar drama, comedia y romance, muestra la profesión de planificación de eventos muy desde adentro, algo que le da un tinte distinto por su novedad.

Por otro lado, y como en muchos otros de los proyectos de Daniel, en Planners se resalta a la figura femenina y, así como una cebolla, las capas de la vida de la protagonista son muchas y dan para el análisis. Malena Carregal, su personaje, acaba de separarse y, en un marco de privilegios, descubre lo que es haber vivido bajo la sombra del hombre: –digámoslo como se lo merece– su insoportable exesposo, interpretado por Gonzalo Valenzuela, con quien fundó una empresa de alta gama de producción de eventos y de la que quedó afuera apenas tomó la decisión de separarse. ‘Creo que Dani, siendo varón, puede dirigir y contar universos femeninos como nadie, no necesariamente una mujer cuenta mejor las cosas femeninas… pienso cuánto más crueles somos entre mujeres a veces, tanto más que la mirada sobre eso mismo que podría tener un varón. También es cierto que cómo nos miramos entre nosotras, sutil, cómplice y amorosamente, es difícil de resonar de otra manera. Yo amo el lenguaje femenino, la lucha que hacemos en las calles, en las marchas… pero también en el día a día; tenemos que estar muy despiertas, encontrándonos entre nosotras cada vez más’, reflexiona la artista.

Cualquier similitud con la realidad, es pura coincidencia, no es que Malena Carregal, Celeste Cid, Bárbara Diez -perdón, no quiero contradecirme con lo que escribo pero siento necesaria la aclaración, además de ser la cabeza del proyecto y una planner profesional, también es la exesposa del Jefe de Gobierno Porteño- y yo, seamos las únicas separadas de esta historia de mujeres que no tuvieron miedo a reinventarse. No estamos solas y el reencuentro primero es con una; dice la vida real y también la ficción. Celeste le da profundidad a esto: ‘no hay manera de escribir una nueva historia si no revisamos nuestras propias narrativas. ¿Cuántas veces nos quedamos diciendo ‘no, yo no puedo’ por haber tenido una mala experiencia y no haber vuelto a intentar? ¿Cuántas veces decimos ‘eso no es para mí’, vaya uno a saber por qué, y cancelamos algo que no sabemos si es o no es para nosotras? Yo creo que son muy vitales las crisis’. Y sí que Malena está envuelta en una, destrozada aunque siempre impecable. Sus looks son toda una oda al minimalismo y a la elegancia, su makeup de ojos cargados de sombra oscura, ese corte bob siempre perfecto… disimulan su verdadero caos interior.

‘El mundo de Malena, por fuera de lo laboral, habla por lo bajo y es una mujer políticamente correcta… ahora bien, cuando está a solas, ¿también es así? Cuando se rompe, ¿qué pasa? ¿Cómo es cuando llora? ¿Y cuándo está enojada?’, me comparte las preguntas que se hizo y desde las cuales ella siente que pudo aportar con su interpretación para que Malena pudiese expresarse más, sin perder su esencia y su siempre habitado rol de ser sostén. Así me cuenta que, para el final del primer capítulo, propuso desde lo actoral una nueva forma de encarar ese final: ‘propuse que esa crisis de Malena sea puesta en la palabra y se reescribió la escena, esa donde ella dice “estoy cansada de sostener”. Me parecía que esa mujer, viviendo en esa casa tan inmensa por cierto y ella tan sola, no podía no darse cuenta de lo que le estaba pasando y, por ende, ponerlo en mención’. Ella apenas puede sostenerse, pero sostiene a su hijo, a su hermana, a su amiga, a la gente que trabaja con ella, a las personas que la contratan y no quiero spoilear, pero puede que llegue a sostener, incluso, a su despechado exesposo que le hace la vida imposible.

LUCYLA

El reparto de la serie además se compone de Leticia Siciliani y Guillermo Pfening y ya es oficial, se viene la temporada 2 de esta obra que, casi por primera vez, pone a la luz lo que se vive en el back de la producción de eventos, además de lo que es lidiar con el deseo y la miseria humana, desde una perspectiva femenina. No puede contar mucho, pero Celeste es generosa y adelanta que ‘la temporada 2 estará atravesada más colectivamente… todas las historias son historias de soledades reconstruyéndose; y resuena con esta era de acuario que se viene. Sin red no hay crecimiento, lo personal y lo colectivo no son entes que crecen separados’. Con esa mirada tan profunda, analítica y mística, Celeste también está escribiendo su segundo libro que, en línea con el primero, Hiel, un libro de pequeños textos, fotos y collages cuenta que ‘será igual: puro texto y el juego estará en la historia y en las tipografías, me es imposible no darle importancia a la parte visual -se ríe-, la influencia del cine o vaya a saber qué; hay libros que son como pelis, este para mí lo es…’. La sensibilidad de Celeste es infinita, imposible que no hayamos hablado de que la presentación de planners fue justo en el portal 5/5, en pleno eclipse de luna llena, ‘me gustan esas alineaciones que suceden entre allá arriba y aquí abajo. De alguna forma un eclipse es considerado como un suceso que viene a ‘desocultar’ algo’, me dice y, sin dudas. esta serie viene a dar luz a aspectos que muchas mujeres también necesitan iluminar y eso se agradece siempre.