Pluma Invitada

Nos lo dicen todo el tiempo: "sé objetiva y no te involucres", pero Guerra Civil revela la verdad detrás de los mitos del quehacer periodístico

Guerra Civil llega a los cines esta semana. La fotógrafa mexicana, Greta Rico, reflexiona sobre lo que significa esta cinta para un profesional que retrata la realidad de un conflicto bélico.
greta rico fotografa mexicana
Juan Carlos Reyes.

Con motivo del estreno de Guerra Civil, la fotógrafa mexicana feminista y de derechos humanos, Greta Rico, escribe para Vogue sus impresiones sobre una historia protagonizada por mujeres que aborda la realidad del fotoperiodismo de guerra.

Soy fotógrafa documental, periodista y educadora enfocada en temas sobre género, derechos humanos y alimentación. Recientemente vi Guerra Civil de Alex Garland, una película que trata sobre una fotoperiodista interpretada por Kirsten Dunst que se encuentra cubriendo un conflicto interno en Estados Unidos con sus colegas Joel (Wagner Moura) y Sammy (Stephen McKinley Henderson), quienes durante el trayecto conocen a Jess (Cailee Spaeny), una joven fotógrafa que se está iniciando en el mundo de la fotografía de prensa.

Tenía mucho que no veíamos un filme en el que el conflicto se desarrolle en Estados Unidos, (a reserva de invasiones extraterrestres y epidemias de zombies) es raro ver películas donde una guerra sucede en ese territorio. Con mucha acción y grandes efectos especiales, la cinta nos adentra en los retos que enfrenta el grupo para realizar su trabajo y nos comparte una mirada íntima que logra detonar muchas interrogantes sobre lo que significa ser fotoperiodista, la importancia del trabajo que realizamos y cómo eso nos afecta de manera personal.

Dunst da vida al personaje de Lee, una famosa y reconocida fotoperiodista que ha realizado coberturas de conflictos en todo el mundo, y aunque esto es solo una breve descripción de la trama, en realidad es poco común que veamos a mujeres interpretando estos papeles. Esta película es perfecta para lanzar algunas interrogantes: ¿Qué roles suelen desempeñar las mujeres en películas sobre guerras? ¿A cuántas mujeres fotógrafas de guerra podemos nombrar?

Las mujeres aparecen en las películas de guerra como madres, esposas, enfermeras, refugiadas, pero muy pocas veces o casi nunca como protagonistas del conflicto. Esto a pesar de que, por ejemplo, en la literatura ya se han escrito libros para desechar el mito de que las mujeres no habían tenido una participación activa en los batallones. De una detallada e importante investigación de Svetlana Alexiévich nació el libro La guerra no tiene rostro de mujer, donde se cuentan relatos de mujeres que participaron en la Segunda Guerra Mundial y que la historia oficial se encargó de borrar.

También es muy común que, al revisar la historia de la fotografía y nombrar a “los grandes” del fotoperiodismo y de la fotografía de guerra, únicamente podemos mencionar nombres de fotógrafos hombres. Esto en realidad tiene mucho que ver con que, hasta hace una décadas, solían ser muy pocas mujeres tomando fotografías en el frente, pero también con un sesgo de género que se ha encargado de dejarlas a ellas y a su trabajo en el olvido, al igual que sucedió con las mujeres de los batallones.

Gracias a becas y reconocimientos, he tenido la oportunidad de asistir a espacios de formación en el extranjero, en donde ha sido muy impactante escuchar los relatos de mujeres que han sido corresponsales de guerra. Relatos donde cuentan que su fixer les pidió matrimonio en medio de su cobertura, que algún colega las acosó en los dormitorios o incluso hemos sabido de casos de violencia sexual, como el que ocurrió en la plaza Tahir durante la primavera árabe hace algunos años.

Con todo esto quiero decir que ser mujer fotoperiodista en zonas de conflicto tiene sus retos, pero mientras más representaciones existan de nosotras realizando esta profesión, más podremos avanzar en el debate hacia las condiciones en la que deberíamos poder realizar nuestro trabajo.

Kirsten Dunst protagoniza Guerra Civil.

Cortesía de Diamond Films.

También es importante mencionarlo: Tuve una grata sorpresa al ver que Guerra Civil es sobre un conflicto bélico pasó el Bechdel Test; una película lo pasa cuando dos personajes femeninos sostienen diálogos entre ellos sobre otros temas que no sean los hombres y su relación con ellos. Las mujeres necesitamos películas sobre lo que sea en las que podamos hablar entre nosotras y escucharnos a nosotras.

Pero no solo eso, también me sorprendió ver a Kirsten Dunst en un papel donde no la sexualizan, no es una fotógrafa de guerra con la ropa ajustada, ella realiza una actuación extraordinaria como una importante y reconocida fotoperiodista que en realidad se ve como una mujer normal, que no acude a las coberturas extra maquillada, con ropa entallada o escotes pronunciados. Seamos honestas, aunque esto que menciono parece algo simple y elemental, no lo vemos frecuentemente vemos en el cine.

Otro gran acierto de Guerra Civil fue el de generar una representación humana de las personas que trabajan como corresponsales de guerra y es que vivimos en tiempos en los que los conflictos, las guerras y las revueltas obtienen cobertura en tiempo real, pero nunca nos preguntamos ¿Cómo se sienten las personas que hacen fotoperiodismo y cubren guerras? ¿Qué apoyo emocional se les brinda? Las guerras pueden parecer algo que solo pasa en otros países, pero las personas periodistas en México trabajamos en un contexto de constante vulnerabilidad y riesgos de seguridad que se equiparan a trabajar en zonas de conflicto. Desde hace varios años, nuestro trabajo ha sido investigar sobre feminicidios, desapariciones forzadas, pueblos desplazados, enfrentamientos armados y todo eso ha tenido fuertes estragos en nuestra salud mental.

Existen muchos mitos alrededor del quehacer periodístico, algunos incluso nos los enseñan en la escuela cuando nos dicen que las coberturas se hacen tomando distancia de las personas o del contexto. Nos dicen todo el tiempo: “sé objetiva y no te involucres”, sin embargo, Guerra Civil pone en el debate que la estabilidad emocional y la salud mental de las personas periodistas que trabajan en ese contexto durante mucho tiempo, se verá afectada si no se busca ayuda o algún tipo de acompañamiento.

Lee es una mujer fuerte y dura que pocas veces sonríe y que siempre está alerta, pero llega un momento donde simplemente se quiebra. Es importantísimo que un producto audiovisual ponga todos estos temas sobre la mesa. Aunque también es de pensarse: cuando vemos películas que tratan sobre fotógrafos y periodistas masculinos, nunca tienen momentos de breakdown, en esas representaciones ellos siempre son fuertes y valientes, pero quienes realizamos este trabajo sabemos que eso no es verdad, todo en su momento tiene un punto de quiebre.

No puedo más que recomendarles que vayan a ver esta gran película, estoy segura de que la van a disfrutar igual o más. Seguramente ustedes verán otras cosas que la harán aún más interesante. Me gustaría leerles y saber qué opinan, mis mensajes están abiertos en todas mis redes sociales (@gretarico).