Florence Pugh nos ha regalado quizás el momento más espectacular del Festival de Venecia 2022. Para ello recurrió a la Alta Costura con un vestido que dijo más que mil palabras.
Y es que vale la pena leer a profundidad lo que simbolizaba este look. Especialmente luego de enterarnos de todo lo que pasó en el set de Don't Worry Darling junto a lo accidentado y controversial que ha sido su estreno en Venecia.
El significado detrás del vestido de Florence Pugh en el Festival de Venecia 2022
El director creativo de la firma Valentino, Pierpaolo Piccioli, bautizó a su colección de Alta Costura Otoño-Invierno 2022 como ‘The Beginning’ (el comienzo, en inglés).
En sus palabras, siempre atinadas, Piccioli nos explicaba en ese entonces que: ‘La Alta Costura es un comienzo continuo, ya que siempre hay que empezar de nuevo, sin patrones ni mapas predeterminados. El mismo diseño puede interpretarse de formas completamente diferentes seis meses o seis años después de su creación. Lo que marca la diferencia son las personas que lo llevan, el enfoque humano’. Esta es sin duda, una visión muy poética de la moda.
Es por eso que el simbolismo que hay detrás de todo ese fabuloso tul bordado es tan bueno como el vestido en sí mismo y el momento que atraviesa actualmente Pugh.
Y esta decisión de vestuario puede tener todas las lecturas posibles, pero no se puede negar que Florence Pugh y su estilista, Rebecca Corbin-Murray, habrán encontrado mucha poesía en el diseñador para así marcar un nuevo comienzo en la carrera de la actriz.
Desde el texto con el que Rebecca acompañó la foto en Instagram ‘Miss Flo’ (Señorita Flo) hasta la sonrisa cómplice de Florence ante los paparazzi, este fue un momento de alfombra roja muy bien estudiado, que nos mostró a la actriz forjando su propio camino.
¿Estamos obsesionados? Sí, estamos obsesionados con ella, con el vestido y con su grandeza.
¿Por qué Florence Pugh fue al Festival de Venecia 2022 con su abuela?
La guinda del pastel en un estreno bastante incómodo, rodeado de dimes y diretes, fue el hecho de que Florence Pugh desfilara por la alfombra roja con su abuela, en lugar de con sus compañeros de reparto de Don't Worry Darling: Un encantador gesto con los pulgares arriba fue tan genial como su entrada triunfal en el festival.
Previamente, la habíamos visto en otro look creado por su aliada Rebecca Corbin-Murray. Pugh estaba a penas preparándose para la batalla, con un spritz en la mano, llevando un conjunto de bralette y pantalones cortos de Valentino en color púrpura.
Esta fue una clase magistral de fortaleza, de ser fieles a nosotras mismas y de cómo enviar un mensaje contundente sin decir nada en absoluto.
Artículo originalmente publicado en Vogue UK, vogue.co.uk.
